Irina también dejó ver que posee microblading, una de las técnicas favoritas por miles para perfeccionar las cejas además de aumentar el volumen de estas, la cual -sin querer- resultó ser una buena solución para Irina en esta cuarentena, al tener una duración de entre 1 o 1 año y medio, además de ser una opción que da una apariencia bastante natural -si se realiza con un profesional-.