A principios de febrero, Adriana Lima anunció que estaba esperando su tercer hijo, el primero junto a su novio, el productor de cine Andre Lemmers III. La brasileña descubrió en abril que, después de sus dos niñas, lo que ahora espera es un niño, justo lo que ella quería como reveló en el vídeo con el que descubrió que efectivamente iba a cumplir sus deseos. La modelo vive un momento muy dulce y diferente al de hace unos meses, cuando declaró tras su paso por el Festival de Venecia que se sentía algo insegura con respecto a su figura: "Mi primer evento después de 2 años, tengo que confesar que a lo mejor no me siento en mi mejor forma física como modelo pero estoy agradecida por tener salud". Ahora, disfrutando plenamente de su embarazo, la brasileña ha mostrado uno de sus antojos y se trata de una fruta cargada de antioxidantes.
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No es la primera vez que Adriana Lima revela en las redes alguno de sus antojos: hace un año, por ejemplo, descubrimos que uno de sus caprichos favoritos no es otro que las tortas de aceite de Castilleja de la Cuesta que aquí se toman de desayuno; también contó con humor como sus hijas, Valentina y Sienna, casi consiguen que cayera en la tentación de comerse unas galletas de chocolate después del gimnasio, aunque al final logró superar las ganas y se preparó gambas a la plancha con espinacas y arroz integral. Lo cierto es que la brasileña siempre ha sido una gran aficionada al ejercicio físico, al boxeo en concreto, y ha seguido una alimentación equilibrada y saludable, como ahora que está embarazada y come una fruta que le trae muchos recuerdos.
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Se llama yaca (en inglés jackfruit), es originaria de Indonesia aunque en Brasil se cultivan muchas variedades, suma unas 90 calorías por cada 100 gramos y Adriana Lima acaba de redescubrirla: "De vuelta a mis raíces.... Me encanta la yaca", ha escrito en sus redes. De la fruta, destaca su bajo contenido en azúcares y alto en antioxidantes, responsables de combatir la formación de radicales libres que acelera los procesos de envejecimiento. Además, la fibra que aporta ayuda a potenciar su poder saciante y a favorecer el buen funcionamiento del sistema digestivo. Su riqueza en proteínas también la convierte en una buena opción para los veganos. Como curiosidad, sus semillas también son comestibles y aportan al organismo los tres tipos de macronutrientes: grasas, carbohidratos y proteínas.
