Bronceado con caña de azúcar: cómo ponerte muy morena sin dañar la piel

La verdad del bronceado saludable que está de moda según dermatólogos y esteticistas

Por Elisa García Faya

Los llamados bronceados saludables son tendencia. Afortunadamente, en general, estamos cada vez más concienciados con el cuidado de la piel. Así, el bronceado con caña de azúcar ha visto incrementada su demanda en los últimos años y son muchos los centros especializados que han abierto recientemente sus puertas. No solo ofrece una vía rápida de lucir una piel bonita como besada por el sol sino que además supone la alternativa perfecta a la tan dañina exposición solar que los dermatólogos instan a evitar. 

Cuando hablamos de bronceado con caña de azúcar, en realidad, nos referimos a un bronceado que se realiza por medio de un principio activo 100% natural llamado DHA. Como nos ha explicado la doctora Isabel del Campo, dermatóloga del Instituto de Dermatología Integral, se trata de un compuesto absolutamente inocuo para la piel. "El gran tamaño de esta molécula no consigue penetrar en las capas más profundas de la piel y se queda en la superficie", refiere la experta, que, además, nos verifica que "es un mecanismo que, en principio, es tolerado por todo tipo de pieles". A continuación respondemos a las preguntas más frecuentes sobre esta técnica.

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¿Qué es el bronceado con caña de azúcar?

La doctora Del Campo nos ha explicado que el DHA, al entrar en contacto con la queratina de la piel, provoca una reacción química natural que consigue broncear la piel (incluso se podría decir teñirla), pero sin activar el mecanismo de la melanina, que es el pigmento que da color a la piel y que hace que esta se broncee por la acción de los rayos ultravioleta. Esto evita que se puedan producir quemaduras y manchas solares, que se experimente un envejecimiento prematuro y, lo más importante, que con el tiempo pueda desarrollarse un cáncer de piel.

¿Cuánto tiempo dura el bronceado con caña de azúcar?

Según Isabel Delgado, socia y directora de comunicación de Tannity, el bronceado dura una semana aproximadamente (dependiendo de las condiciones naturales de la piel y de cómo se cuide esta antes y después de la sesión) y desaparece con la propia regeneración celular. Para alargar la vida del bronceado, la experta recomienda hidratar la piel a diario, utilizar una crema bronceadora específica cada dos o tres días y exfoliarla antes de hacerse el tratamiento con un guante de crin. "Se puede hacer todas las semanas o cada 10 días, en función de lo que dure el bronceado en cada piel. Esto es un bronceado saludable, no es necesario descansar si quieres mantener el bronceado siempre", confirma Delgado. 

Es pertinente aclarar en este punto que desde Tannity dicen que "no nos gusta que nos identifiquen con la caña de azúcar porque tiende a un color anaranjado. Sin embargo, el principio activo DHA que contienen nuestros productos proviene de la caña de azúcar pero nuestras fórmulas han sido mejoradas y utilizando los correctores del color, los resultados son verdaderamente naturales y bonitos".

¿Cómo se hace el bronceado con caña de azúcar?

El proceso, por lo que nos cuenta Isabel Delgado, es rápido y sencillo. "En tan solo 15 minutos realizamos una fórmula que personalizamos en el momento para cada uno de nuestros clientes teniendo en cuenta su tipo de piel, tono, subtono y la intensidad de bronceado que se desee conseguir. Después, la aplicamos mediante aerógrafo y así, en una sola sesión de 15 minutos, se consigue un bronceado muy natural. No se necesitan varias sesiones para adquirir más bronceado", expone. 

Por su lado, la dermatóloga Isabel Delgado recomienda lo siguiente: 

  • Tener en cuenta que, como cualquier producto que se aplica sobre la piel, puede provocar alergia de contacto.
  • Antes de realizarse este tratamiento habría que consultar con el dermatólogo si se tiene psoriasis, dermatitis o una herida que no ha sanado del todo y sigue abierta.

Delgado confirma que, al margen de estas cosas, es un bronceado saludable y, sobre todo, una buena alternativa a la exposición solar si se quiere lucir una piel morena. Aunque, y esto es importante, ¡no exime de emplear protección solar a diario!