Después de un periodo de vacaciones o de pasar varios días sin hacer ejercicio, regresar a la rutina puede ser un poco difícil para tu cuerpo, pero con un poco de motivación y llevando a cabo los siguientes trucos, dominarás tu entrenamiento y le sacarás todo el provecho, ¡vamos!

1. Calienta bien los músculos antes de comenzar

Cuando has estado en reposo por algunos días (sobre todo después de un fin de semana largo o puente) tus músculos pueden tardar un poco más en entrar en calor. Olvídate de subirte 5 minutos a la elíptica, la mejor manera de comenzar es poner una canción súper movida y alegre y hacer movimientos grandes con todo tu cuerpo, empezando por la parte superior pasando por tu centro y terminar en tus pies. Mueve todas las articulaciones y haz estiramientos largos.

2. Llega al gimnasio con un plan en mente

Si llegas al gym sin saber qué vas a trabajar hoy puede que te sientas abrumada con tantos aparatos y te aburras incluso antes de empezar. Tómate unos minutos antes de salir de tu casa para apuntar los músculos que quieres ejercitar y los movimientos que vas a realizar, así podrás entrar directo al grano y no desperdiciarás ni un solo minuto.

3. Cuida la intensidad

El error número uno que muchas personas cometen al retomar la rutina es creerse superpoderosos y empezar en la máxima intensidad. Recuerda que tuviste a tus músculos de vacaciones así que no puedes exigirles el máximo de un jalón. Comienza poco a poco, mantén tu nivel en uno que sea retador pero que no termines exhausta y aumenta a pasos pequeños el esfuerzo cada día.

4. Alterna tus días de entrenamiento

Puede que traigas la motivación a tope y que quieras hacer ejercicio todos los días y no quiero tumbar tus ganas pero es mejor si no lo haces diario. Tu cuerpo necesita descansar para reparar tus músculos y recargarse de energía. Lo ideal es que durante las dos primeras semanas te ejercites entre 4 y 5 días a la semana, ya después puedes entrenar entre 5 y 6 días siempre y cuando tus niveles de energía sean buenos. Deja siempre un día de descanso total para recuperarte por completo.

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5. Combina los músculos que trabajas

No hagas todos los días los mismos movimientos, si vas al gimnasio cambia los aparatos, toma distintas clases o varia tus movimientos. Procura que si trabajaste las piernas hoy, mañana descansen y ejercites otros músculos. Esto hará que tengas mejores resultados y evitará que te aburras.