Manoli, de 84 años, lleva más de una década asistiendo como público al Sorteo Extraordinario de Navidad. Siempre con un disfraz a cada cual más original: de bombo, de árbol de Navidad, de rana de la suerte… en esta ocasión se ha decantado por asistir con uno de estrella y ha acaparado, una vez más, todas las miradas.