2/8Cada cosa en su lugar, y qué mejor que ir organizando desde el primer momento. Despídete de tu ‘silla de la ropa’ en tu cuarto o, peor aún, de dejar la ropa sucia en el piso del baño. Un cesto de ropa sucia es imprescindible, pero si quieres ir dándole orden a todo desde el primer momento, por qué no elegir uno que ya venga con las divisiones por colores. Éste tiene ya determinada la segmentación de la ropa de color, clara y oscura, para que en cuanto te la quites la coloques en su lugar y a la hora de lavar no haya sorpresas. Olvídate de las camisas pintadas de rosa por una calceta roja, y ahórrate el dividir la ropa antes de lavar.
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Cada cosa en su lugar, y qué mejor que ir organizando desde el primer momento. Despídete de tu ‘silla de la ropa’ en tu cuarto o, peor aún, de dejar la ropa sucia en el piso del baño. Un cesto de ropa sucia es imprescindible, pero si quieres ir dándole orden a todo desde el primer momento, por qué no elegir uno que ya venga con las divisiones por colores. Éste tiene ya determinada la segmentación de la ropa de color, clara y oscura, para que en cuanto te la quites la coloques en su lugar y a la hora de lavar no haya sorpresas. Olvídate de las camisas pintadas de rosa por una calceta roja, y ahórrate el dividir la ropa antes de lavar.
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