Ante 45 periodistas acreditados, muchos más de lo que un photocall en el Teatro Real suele congregar, Tamara Falcó ha reaparecido en público después de cuatro días en los que su vida ha dado un vuelco. Sin perder la sonrisa, muy elegante con un traje de sastre negro y camisa blanca de la firma Sandro, ha posado ante los medios de comunicación, que la aplaudieron a su llegada. Este evento sobre arquitectura y diseño de interiores estaba en su agenda antes de que salieran a la luz unas comprometedoras imágenes de Íñigo Onieva, besándose con otra mujer. Si bien es cierto que en un principio la ganadora de Masterchef Celebrity había decidido cancelar su participación, finalmente ha cumplido con sus compromisos previos a pesar de las delicadas circunstancias personales que la rodean.
Valiente y muy serena, ha pronunciado por primera vez ante la prensa la palabra "exnovio" refiriéndose a Íñigo: "Decidí apostar por mi novio... exnovio (corrigió) hasta que vi que era verdad", ha contado sobre el momento en el que se dio cuenta de la deslealtad. "El Iñigo con el que yo me he prometido no tiene nada que ver con ese", ha dicho en referencia a la imagen que ha proyectado en el polémico vídeo.
"Yo estaba enamorada (...) nunca pensé que estuviera abusando de mi confianza", ha afirmado después de asegurar que estaba aún "en estado de shock". A pesar de que no podía evitar cierta tristeza en la mirada, también se ha permitido bromear. "Creo que mi madre filtró el vídeo a los medios", dijo entre risas tras asegurar que Isabel Preysler era uno de sus grandes apoyos. Además, Tamara ha cerrado la puerta por completo a un reconciliación: "Lo veo imposible".
"Con los cuernos soy muy cuadriculada", ha asegurado, y el punto de inflexión paraTamara fue el viernes por la noche cuando Iñigo confesó tímidamente: "puede que sea verdad". La hija de Isabel Preysler no ha querido entrar en más detalles sobre cómo se desarrollaron los acontecimientos, pero sí algo tenía claro es que si el vídeo era reciente, eso suponía el punto y final a su relación. Y así ha sido. En cualquier caso y, a pesar de todo, "contenta de que haya salido ahora", decía, antes de pasar por el altar o incluso de formar una familia
Tamara Falcó: 'Todo pasa por algo'
Se reiteraba así en el mensaje que lanzó previamente en las que han sido sus primeras palabras tras la ruptura. "Creo que todo pasa por algo y quiero pediros perdón y quiero agradeceros la labor de investigación que habéis hecho porque si no no me hubiera enterado nunca", ha afirmado en una conversación telefónica con Sálvame. "Es una situación muy complicada, pero estoy muy agradecida. Tengo la sensación de que cuando vi el segundo vídeo que hay cambio todo y la verdad es que pues sí imagínate para mí que el matrimonio es una promesa de amor eterno".
Para Tamara el trabajo es un pilar fundamental y tenía claro que no iba a dejar que su vida sentimental afectase a su rutina laboral, por eso decidió cumplir con esta cita en su agenda. Es de esperar, por tanto, que, igual que ha hecho esta tarde, mañana jueves esté en la mesa de discusión de El Hormiguero, espacio televisivo en el que colabora semanalmente y donde la semana pasada contó con lujos de detalles todo sobre el momento en el que Iñigo le pidió matrimonio, así como la fecha de su paso por el altar.
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La vida de la hija del fallecido Carlos Falcó ha dado un vuelco monumental en los últimos días y tras el desengaño, ha abandonado el piso que compartía con Iñigo trasladándose a la casa de su madre, al que siempre será su hogar y refugio pese a ser una mujer independiente. En el apartamento dejó el original anillo de diamantes con el que su ya exnovio le había pedido matrimonio.
El silencio de Íñigo Onieva
Íñigo Onieva aún no se ha pronunciado, solo quiso aclarar lo sucedido a través de un comunicado en sus perfiles sociales en el que pedía perdón tanto a Tamara como a su familia por el enorme daño que les había ocasionado. Precisamente, en las redes sociales se han fraguado los últimos gestos de ambos, puesto que la influencer eliminó durante el fin de semana la foto en la que anunciaba su compromiso matrimonial, y, además, los dos han dejado de seguirse. Un tiempo complicado en el que el empresario, siguiendo los pasos de su expareja, ha querido buscar refugio en brazos de sus seres queridos. Su madre Carolina Molas ha reconocido ante las preguntas de los periodistas que todos ellos lo están pasando muy mal y que se encuentran muy tristes tras los sucedido.
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