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El mundo de las letras y de la cultura en España ha perdido a una de sus figuras más destacadas. La prolífica escritora Almudena Grandes ha fallecido este sábado en Madrid a causa del cáncer que padecía. La autora de los Episodios de una guerra interminable tenía 61 años y llevaba más de uno tratando de superar la enfermedad que ella misma anunció que sufría hace poco más de un mes. Dio la noticia en su columna de El País Semanal, bajo el título Tirar una valla, donde reconocía: "he tenido que escribir algunos artículos muy complicados a lo largo de mi vida", pero "ninguno como este".
En aquel desgarrador texto explicaba que le fue detectado un tumor maligno durante una revisión rutinario. Pese a ello, contaba esperanzada que el pronóstico era bueno y se mostraba dispuesta "a pelear" todo lo que haga falta y más. Almudena, que estaba inmersa en una nueva novela, Mariano en el Bidasoa, aclaraba que, si no lo había desvelado hasta ese momento era porque quería asumirlo bien para "estar tranquila, confabularme con mi cuerpo y conmigo misma". A la espera de comprobar si ese último título con el que cerraba su serie de Episodios de una guerra interminable se publicará de manera póstuma, la pluma de Grandes forma ya parte de la historia de España, la misma España que sabía radiografiar como nadie.
Madre de tres hijos y pareja del poeta Luis García Montero, se licenció en geografía e historia y vivió intensamente los años de la movida madrileña, una década llena de descubrimientos que plasmó en su primera novela, Las edades de Lulú, con la que entró por la puerta grande en el mundo de la literatura. Su ópera prima fue traducida a más de 20 idiomas y adaptada al cine por Bigas Luna. Pese al éxito cosechado, no se estancó en el mismo género y su obra evolucionó hacia las historias humanas que respiraban y viajaban en el contexto político y social del siglo XX. El corazón helado, Atlas de la geografía humana, o Los aires difíciles la consagraron definitivamente. Sus últimos trabajos conforman la serie de Episodios de una guerra interminable, que comenzó con la laureada Inés y la alegría como primer título de una serie de novelas que, situadas en la posguerra española, entrelaza la ficción y la historia con un espíritu crítico y personajes inolvidables que se cruzan en los diferentes volúmenes arañando conciencias en cada uno.
Además de la literatura, tenía otras pasiones. Una era la cocina. Dicen que su cocido era famoso en Madrid y en algunas de sus obras como Inés y la alegría ha sabido salpicar alguna receta que otra por sus páginas. Otra era el Atlético de Madrid, club que ha lamentado su fallecimiento con un emotivo mensaje: "Hoy todos los atléticos estamos de luto. Nos ha dejado Almudena Grandes, una rojiblanca de coración, Nuestro más sentido pésame para sus familiares y amigos. Descansa en paz, Almudena".
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