Los perros detectores de Covid han resultado más efectivos de lo esperado

Por Samanta Carrasco

A lo largo de los años, mucho se ha hablado de que los perros se han convertido en el mejor amigo del hombre, y es que, los canes tienen tantos beneficios que la teoría ha sido poco cuestionada. Pero, si eres de los que aún tienen sus dudas, aquí te contamos un poco más, pues aparte de ser animales inteligentes, los perros se han convertido en valiosos compañeros de trabajo. Hasta el momento, existe una gran cantidad de ejemplares caninos que no solo fungen como perros de servicio ayudando a los humanos, sino que, además, participan en grandes e importantes labores de rastreo y búsqueda, todo gracias a su capacidad olfativa. Los canes tienen la posibilidad de ser entrenados para detectar desde estupefacientes, explosivos, hasta enfermedades, entre ellas, ahora el Covid-19. Así lo demostró un proyecto finlandés que comenzó a finales de septiembre en el aeropuerto de Helsinki, donde cuatro canes rastreadores además de detectar a personas con Covid-19 asintomático, hicieron la detección de personas que ‘parecían estar sanas’, y que días después, confirmaron haber dado positivo a la enfermedad. 

MÁS NOTICIAS CÓMO ÉSTA:

Expertos advierten de la posibilidad de nuevas pandemias

Llegan a México las primeras dosis de vacunas chinas para pruebas en la fase 3

El pasado septiembre, Finlandia acaparó los titulares con su especial proyecto en prueba piloto: perros rastreadores en el aeropuerto que detectaban casos asintomáticos de coronavirus. Una iniciativa que en las últimas horas, investigadores afirman podría ser mejor que las pruebas realizadas en laboratorio especializados. Y es que, el grupo de perros adiestrados para percibir la enfermedad mediante el olfato en el aeropuerto de Helsinki, al principio causó grandes incógnitas en los científicos responsables, pues los canes comenzaron a hacer la detención de varios viajeros que en este momento ‘parecían estar bien’, y que para confirmarlo se sometieron a una prueba de hisopo, dando como resultando negativo al Covid-19. Sin embargo, unos días después, estas mismas personas confirmaron a los investigadores tener los síntomas de la enfermedad.

Los perros tienen la capacidad de detectar cambios en el olfato de las personas que pueden indicar enfermedades como: el cáncer, la diabetes, Parkinson, el melanoma y todo apunta a que, ahora tal vez también el Covid-19. Debido a que los investigadores continúan trabajando en el tema, los perros no podrían ser tomados como la única forma para detectar el coronavirus, pero esta información bien podría indicar buenas noticias, pues los perros podrían indicar quién debería pasar por la prueba. Anna Hielm-Bjorkman, la investigadora principal en el estudio, explicó a The Times, que Miina, Kossi y Galo -tres de los perros en la iniciativa-, obtuvieron una tasa de éxito de casi el 100% en la detección de viajeros con el virus: "De hecho, están encontrando resultados negativos de PCR que serán positivos en una semana”.

El proyecto que comenzó el pasado 22 de septiembre en Finlandia, consiste en una prueba que toma alrededor de 10 segundos. La dinámica para los viajeros consiste en que, las personas toman una toallita, la colocan sobre su cuello con el objetivo de recolectar rastros de su sudor en ellas, ya listas, las depositan en unas cajas, que le toma segundos a los perros rastreadores olfatearlas y dar resultados. El estudio que comenzó siendo el primero de este tipo en Europa, y el segundo en el mundo, seguido por los Emiratos Árabes Unidos, ha inspirado a un gran número de países, entre ellos Estados Unidos, Francia, Australia, Londres, Alemania, y ahora nuestro país, como informó a mediados de octubre el Gobierno de Sonora.

Una posible nueva opción menos incómoda, más ecónima y rápida

Hasta el momento, las pruebas de tipo PCR se utilizan como la principal herramienta para detectar el Covid-19 en todo el mundo, y consiste en un hisopo nasal que busca los signos del virus. De avanzar el proyecto de los canes, la detección del virus podría convertirse en una alternativa más rápida, económica, y lo mejor… menos incómoda.