Hay veces en las que la realidad supera a la ficción y Corea del Sur está al pendiente de una controversia que se ha dado con uno de los hombres más ricos del país como protagonista. Y es que el presidente de uno de los imperios tecnológicos de Asia, SK, llamado Chey Tae-won se encuentra en la mira de todos. Al parecer, el empresario ha tenido por años una relación extramarital con la famosa influencer Chloe Kim y aunque había logrado mantener estas cuestiones personales al margen del ojo público, su esposa ha decidido romper el silencio y con una publicación en redes sociales le ha pedido el divorcio. Si eso ya era comentado por todos, lo que está pidiendo es todo un escándalo, pues con los millones en acciones que ha solicitado, Tae-won podría hasta perder la presidencia de la empresa que ha puesto su nombre en el mapa.
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Se tiene que dejar claro que Chey es el noveno hombre más rico de Corea del Sur y su fortuna ha sido valuada por Forbes en más de 2,600 millones de euros (casi 60 mil millones de pesos mexicanos). Por su parte, su esposa, Roh Soh-yeong, no solo es fundadora del museo de arte contemporáneo Art Center Nabi, sino que es hija del expresidente del país Roh Tae-woo.
La pareja tiene tres hijos en común y según reportan los medios, desde el 2011 llevaban vidas separadas de puertas adentro. Hasta ahí todo parecía normal, hasta que Roh decidió tomar su cuenta de Facebook y escribir: “He intentado construir, proteger y mantener unida a mi familia durante los últimos años. Incluso en los momentos más duros y humillantes esperé y me aferré a un rayo de esperanza, pero ahora ya no lo veo…Creo que ahora es adecuado dejar que mi marido encuentre la felicidad que busca tan desesperadamente”.
El mensaje parece amable, pero Roh tiene una lista de peticiones que implicaría 1.6 mil millones de dólares, por lo que en Asia ya se le llama el divorcio del siglo. Se sabe que desde el 2015 él anunció que tenía una segunda familia con su amante -mismo año en que estuvo en la cárcel unos meses-. “Hoy quiero hacer una vergonzosa confesión, no como empresario sino como humano”, escribió en una carta al periódico Segye Ilbo, en la que explicaba que llevaba 10 años con problemas en su matrimonio, “Mientras tanto, conocí a alguien que me dio consuelo. Me ayudó a superar todo el conflicto y empecé a soñar una nueva vida con ella. Nuestro bebé nació un verano de hace algunos años”.
Se dice que él buscó el divorcio de su mujer desde hace un tiempo, pero no pensó que al cumplirse su deseo podría incluso, llegar a perder la presidencia de su compañía.