Estaba destinada a ser uno de los grandes estrenos de la ficción española en la pequeña pantalla y, efectivamente, así ha sido. El éxito de El embarcadero, la nueva serie de Movistar+ protagonizada por Verónica Sánchez y Álvaro Morte, ha cosechado el aplauso de crítica y público, que ha vuelto a ver en este drama una gran producción al nivel de La Casa de Papel, el anterior éxito de sus creadores.
Aunque lleva defendiendo su trabajo y el de todo el equipo desde hace meses, no ha sido hasta ahora cuando Verónica ha sentido el cariño del público. Abrumada por el éxito y los buenos comentarios, la actriz no ha podido más que agradecer una y otra vez en redes sociales las buenas palabras de la audiencia.
"Qué maravilla sentir cómo habéis recibido El embarcadero. Es emocionante leer cómo os llega, cómo analizáis cada momento o cómo empatizáis con los personajes. Para nosotros ha sido un auténtico viaje y ahora es vuestra. GRACIAS por la acogida", escribía horas después del estreno en su perfil de redes sociales. "El embarcadero ha visto la luz este fin de semana y vuestra acogida ha sido tan brutal que estamos sin palabras. ¡GRACIAS!", publicaba un día más tarde.
La actriz consigue de nuevo con este proyecto el triunfo en televisión. No es la primera vez para ella, pues ya sabe lo que es saborear las mieles del éxito gracias a otros proyectos como Los Serrano, Gran Reserva o Tiempos de Guerra. Eso sin contar los cosechados a lo largo de su carrera cinematográfica, donde ha sido nominada tres veces a los Premios Goya por su interpretación en Camarón, Gordos o Al sur de Granada.
En lo personal, Verónica también puede decir que está feliz, aunque siendo fiel a ella misma, la actriz no suele compartir ni hablar de sus relaciones. Su última pareja conocida fue el modelo argentino Isaac Guzmán, al que conoció en 2016 tras finalizar su relación con Daniel Pérez Prada. Aunque durante un tiempo compartieron fotos juntos, en el perfil de él hace meses que Verónica no aparece y ambos han dejado de seguirse, lo que en tiempos modernos parece una ruptura.
