Con solo 29 años, Aubrey Daquinag, es una joven que se aventuró a dejarlo todo para cumplir su sueño de viajar por el mundo. Hace cinco años Aubrey, que nació en Melbourne, Australia, decidió renunciar a su trabajo de tiempo completo para recorrer y ver los paisajes más hermosos: “Quería seguir mis sueños aunque no sabía cómo hacerlo”, dijo la joven a People. En su libro Wander Love, que publicará el primero de agosto de este año Aubrey escribió: “Dicen que sí hacemos algo que amamos no trabajaremos ni un día de nuestra vida. Desde que empecé esta etapa siempre olvido en qué día de la semana estoy, por que trabajar esperando solo a que lleguen los fines de semana ya no existe en mi calendario”.
Todo empezó en el momento que entregó su aviso de renuncia y compró un pasaje a la India, desde ahí nunca miró hacia atrás: “Siempre he tenido una mente muy curiosa y creativa”, le dijo a Femail la joven viajera. Así fue como también emprendió el camino para convertirse en una blogger de viaje y estilo de vida. Lo que comenzó como un pasatiempo pasó a convertirse en su nuevo trabajo de tiempo completo. Aubrey pasa sus días explorando lugares mágicos como la India, México, Europa y Colombia mientras comparte tips y experiencias con sus seguidores.
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Al viajar sola siempre hay riesgos pero Aubrey está abierta a aprender y opinó sobre el tema: “Es más probable que conozcas a gente nueva y hagas nuevos amigos cuando escoges un hostal o una posada en lugar de un hotel reconocido o lujoso”, también dio recomendaciones para encontrar a personas con las que probablemente te lleves mejor: “Cuando te unes a una clase, por lo menos sabrás que ahí puedes conocer a personas que tengas tus mismos intereses”, tener una mente abierta es clave para Aubrey: “Algunos de mis mejores amigos los he hecho en viajes solo por ser curiosa y tener la mente abierta. Sonríe y sé amistoso”, recomendó esta aventurera australiana.
En cuanto a mantenerse orientada en los lugares nuevos, dijo que Google Maps la mantiene segura: “Incluso si no lo sigo, me da paz saber que lo tengo mientras estoy explorando”. Una de las lecciones que aprendió en el trayecto fue a reemplazar el miedo por la curiosidad: “Aprende el idioma, prueba la comida típica, respeta la cultura, interactúa con los locales y aprovecha cada momento. Si nos quedamos dentro de nuestra zona de confort, nunca vamos a crecer”. Así mismo, dijo que uno de los lugares que más ha resaltado en su camino es Tulum, México: “Yoga y jugos frescos en la mañana, viajes en motos con el viento soplando tu pelo, bailar descalza toda la noche en una jungla paradisiaca y descubrir los cenotes… todo eso fue como una recarga de energía para mi alma”, comentó la blogger que ahora cuenta con más de 37 mil seguidores en Instagram.
