El fin de semana pasado, los habitantes de distintas ciudades de Estados Unidos salieron a las calles para levantar la voz para pedir un mayor control de las armas en la March For Our Lives (marcha por nuestras vidas). La manifestación liderada por los jóvenes sobrevivientes del tiroteo de Parkland, reunió las voces de los chicos que quieren marcar la diferencia y forjarse un mejor futuro, no solo para ellos, sino para las generaciones venideras. Entre los discursos más emotivos del día, estuvo el de Yolanda Renee King, quien a los 9 años, tiene un don de la palabra que bien pudo haber sido heredado de su abuelo, Martin Luther King.
“Mi abuelo tenía un sueño, el de que sus cuatro hijos pequeños no fueran juzgados por el color de su piel, sino por su carácter”, comenzó haciendo referencia al famoso discurso de MLK I Have a Dream. Siguiendo con la misma línea, continuó: “Yo tengo un sueño, de que ya es suficiente. De que éste debería de ser un mundo libre de armas. Punto”. Así de tajante y segura de sus palabras se dejó ver Yolanda a su corta edad.
“¿Podrían repetir esto por mí? Difúndanlo. ¿Ya escucharon? Alrededor de todo el país. Nosotros…vamos a ser…una gran generación”, continuó arrancando una total ovación por parte de la audiencia. Como si eso de hablar frente a una multitud de cientos de personas fuera cosa de todos los días, Yolanda pidió al público: “Ahora quiero que lo digan como si en verdad lo creyeran”.
Aunque se trató de un mensaje breve, la pequeña tuvo la capacidad de expresar con esas palabras lo que muchos de sus compañeros están sintiendo en este momento. Yolanda es hija de Martin Luther King III y a pesar de que es muy pequeña, sigue con la tradición familiar de luchar por las causas que cree justas.
Hasta el momento, los jóvenes no han recibido una respuesta explícita a su petición, pero su mensaje ha dado la vuelta al mundo y cuentan con miles de simpatizantes.
