El amor que siente la actriz estadounidense Gwyneth Paltrow por nuestro país es de sobra conocido. La ex mujer de Chris Martin, líder de la banda Coldplay con quien estuvo casada hasta 2016 y con el que tiene dos hijos, estuvo de intercambio durante un año con una familia de Talavera de la Reina (Toledo) cuando era una adolescente y aquel viaje le cambió la vida. Se enamoró de nuestro país y de su idioma -lo habla de manera fluida- y aún, 30 años después, tiene relación con la familia que la acogió en 1987, los Lázaro Ruiz con los que sigue manteniendo el contacto y visita siempre que puede.
Su pasión por España parece que se la ha transmitido a sus hijos Apple, de 13 años, y Moses, de 11. De hecho su primogénita ha pasado dos semanas de junio en el municipio gaditano de Conil de la Frontera haciendo curso intensivo de español, según publica ABC. La adolescente, además de perfeccionar el castellano seguramente ha podido disfrutar de las magníficas playas que ofrece la costa gaditana y la variada gastronomía andaluza. El idilio de Gwyneth con nuestro idioma va más allá y desde hace años pide a sus hijos que hablen entre ellos en español para mejorar su nivel.
Además de perfeccionar el idioma Gwyneth siempre ha considerado que su paso por tierras manchegas fue una de sus mejores experiencias vitales porque le ayudó a "comprender el mundo" y encontró una "segunda familia". Así que no es raro que haya querido que su hija disfrutara la misma vivencia.
Siempre que su apretada agenda se lo permite, a la ganadora de un Oscar le gusta pasar unos días por España y en esta ocasión aprovechó la estancia de Apple para pasar unos días de relax con ella y con Moses y, de paso, recogerla no sin antes pasar por Talavera para visitar a su 'otra familia'. Desde allí se fue a Conil, tal y como reflejó en su Instagram, recogió a Apple y se acercaron a Sevilla donde salió a cenar al restaurante Ispal donde probó la corvina en salsa de carbillas y los vinos de la sierra del norte. El día 24 de junio, según señala ABC, la intérprete y sus dos niños, fueron hasta Marbella en su propio coche y sin guardaespaldas y se alojaron, según varios testitgos, en el hotel Villa Padierna Palace, el mismo en el que se hospedó Michelle Obama durante sus vacaciones de 2010.
El idilio de la artista con su pueblo de acogida parece que es mutuo. En 2003 el Ayuntamiento de Talvera de la Reina la nombró hija adoptiva del municipio por su defensa "vehemente" de la ciudad en un acto en el que le entregaron la insignia de oro de la ciudad, el bastón de mando, un pergamino, que la acredita como tal y una placa de cerámica conmemorativa del acto. En aquella ocasión acudió estuvo arropada, como no podía ser de otra manera por la familia Lázaro Ruiz.
