La Semana Santa de Castilla y León, la más grande del mundo

Ninguna otra región española suma tantas celebraciones reconocidas a nivel internacional. Ni sus procesiones son tan solemnes, silenciosas y recogidas. Ni posee una imaginería tan magnífica, ni siquiera un escenario tan monumental. Es lo que la hace distinta, pero se vive con el mismo fervor. Estos son sus momentos más especiales.

Por Hola.com

Sin entrar en el ‘pique’ de cuál es la mejor Semana Santa de España –que ha enfrentado a Sevilla con Ferrol por el primer puesto–, las que se celebran en las ciudades y pueblos de Castilla y León no tienen discusión, con 8 de estas celebraciones declaradas de interés internacional –Ávila, Valladolid, Zamora, León, Salamanca, Palencia, Medina del Campo y Medina de Rioseco– y otras de carácter nacional: Burgos, Astorga, Ponferrada y Sahagún, estas tres en la provincia de León.

El escaparate de arte, pasión, tradición y fervor religioso es el mismo estos días en las calles de nuestro país: el desfile de penitentes y nazarenos con sus túnicas, el rostro oculto bajo los capirotes y los pies descalzos, el paso de las imágenes religiosas talladas con realismo y maestría, la música de tambores y trompetas…, pero… ¡tan diferente en unos rincones que en otros! Porque si las procesiones en Andalucía son un derroche de luz y color, el silencio y la austeridad definen las Castilla y León. Estas suman, además, una lección de historia del arte, por la calidad de las imágenes de sus pasos, obras de grandes maestros como Gregorio Fernández, Juan de Juni y Berruguete. Una buena representación de ellas duermen en el Museo de Escultura de Valladolid y se pueden visitar el resto del año.

El mejor itinerario para disfrutar de la Semana Santa en Sevilla

VER GALERÍA

Hacemos un repaso por el mapa castellanoleonés para mostrarte los momentos imprescindibles de su Semana Santa:

SALAMANCA

  • La celebración de los Oficios en la capilla de la vieja Universidad, junto a las cenizas de Fray Luis, el Jueves Santo, cuando todos los catedráticos visten sus galas académicas.
  • La sobriedad del desfile del Cristo de los Doctrinos, que transcurre sin acompañamiento musical y con cardos adornando los pasos el Lunes Santo.
  • El acto del Descendimiento el Viernes Santo, que viene celebrándose desde 1615 por la cofradía de la Vera Cruz.
  • La procesión del Cristo del Amor y de la Paz el Jueves Santo. Los cofrades, que portan faroles de mano, salen del barrio del Arrabal, cruzan el Tormes por el Puente Romano y entran en la ciudad antigua por la Puerta del Río.

Razones para redescubrir Salamanca una y otra vez

VER GALERÍA

ÁVILA

VER GALERÍA

VALLADOLID

  • El Sermón de las Siete Palabras en la Plaza Mayor la mañana del Viernes Santo, precedido por el anuncio del pregonero que, acompañado de 70 cofrades a caballo, recorre las calles, plazas e iglesias de la ciudad.
  • Ese mismo día, el desfile de todos los pasos por el casco histórico, con algunas de las obras cumbre de la imaginería castellana.

Paradas imprescindibles para exprimir la esencia de Valladolid

LEÓN

  • La Ronda de la cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, en la que se llama con esquila, clarín y tambor a la procesión de la mañana del Viernes Santo.
  • La procesión de los Pasos del Viernes Santo, en la que participan durante casi 10 horas alrededor de 4.000 ‘papones’, una cofradía únicamente formada por hombres que portan 13 pasos y recrean los momentos centrales de la Pasión.

ZAMORA

  • Asombran especialmente la procesión del Silencio y el desfile de las Capas Pardas el Miércoles Santo, donde los cofrades de esta hermandad ataviados con las tradicionales capas y portando faroles protagonizan, a los sones de las matracas y los bombardinos, una de las procesiones más espectaculares y extrañas de las que se conocen.
  • Sobrecoge en la noche del Jueves Santo el canto del Miserere en la plaza de Viriato ante el Cristo Yacente.
  • La procesión la noche del Jueves al Viernes Santo del Nazareno, acompañado por la marcha de Thalberg.

48 horas en Zamora, románico de récord mundial y mucho más

MEDINA DEL CAMPO (VALLADOLID)

  • El Jueves Santo, la procesión de Caridad y la de la Vera Cruz.
  • Las procesiones del Silencio y del Encuentro el Viernes Santo.
  • Bandas y cornetas acompañan a todas las cofradías de la villa, que participan en la procesión de la Resurrección.

VER GALERÍA

MEDINA DE RIOSECO (VALLADOLID)

  • Las procesiones del Mandato (Jueves Santo) y del Dolor (Viernes Santo)
  • Los desfiles de gremios y la salida de los Pasos Grandes el Viernes Santo, que son portados a hombros por las angostas calles de la localidad.
  • El baile de los dos pasos en la calle Mayor durante la procesión del Santo Encuentro.
  • La Rodillada, la reverencia que realizan los pasos ante la Virgen de la Cruz al pasar junto al arco de Ajújar.

Pueblos de Valladolid que te van a gustar mucho

VER GALERÍA

PALENCIA

  • La escenificación del Descendimiento el Viernes Santo en la plaza de la Inmaculada, junto a la seo palentina, antesala a la procesión del Santo Entierro.
  • La llamada de hermanos, convocando a los cofrades con toques de corneta y golpeando las puertas con varas durante las noches de la semana de pasión.
  • El tararú, la corneta alargada que puede llegar a tener más de un metro de longitud y se toca para indicar a los cofrades cuando paran o reanudan el paso.

Palencia, la desconocida provincia de la que casi nadie habla

VER GALERÍA

No te pierdas:

LAS PASIONES VIVIENTES

En Lerma, al ponerse el sol el Jueves Santo, cerca de 200 vecinos de la villa escenifican los últimos momentos de la vida de Cristo en las calles de este pueblo burgalés, de los más bonitos de España. A lo largo de dos horas se van sucediendo distintas escenas en rincones como la plaza de Santo Domingo, la  de Santa Clara o el Palacio Ducal, un recorrido que concluirá con un momento de gran realismo y vistosidad: la Crucifixión. Más antigua es la pasión viviente de Covarrubias, y única, porque sus personajes (casi un centenar de actores) permanecen inmóviles sin articular palabra a lo largo de los rincones más bellos de la villa, mientras una procesión de nazarenos, pasos y público los contemplan.

Lerma, el pueblo de Burgos que presume de ser villa ducal

VER GALERÍA

LA BAJADA DEL ÁNGEL DE PEÑAFIEL

Más que en el castillo que domina la villa desde sus alturas, en sus vistas sobre el valle de viñedos donde se crían los vinos de la Ribera del Duero, o en su Museo del Vino, toda la atención el Domingo de Ramos en Peñafiel se centran en su singular plaza del Coso, a la que se asoma un conjunto de viviendas con balcones que cobran vida durante la celebración de las fiestas de San Roque y, especialmente, durante la Bajada del Ángel. Es el acto de la Semana Santa más aplaudido y multitudinario, cuando un niño vestido de blanco desciende colgado para quitar el manto de luto que cubre la imagen de la Virgen mientras suelta un par de palomas.

Una ruta de Peñafiel a Sardón de Duero solo para sibaritas