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Manuel Carrasco, padre primerizo: ¿Qué retos emocionales tiene por delante?

¿Qué retos psicológicos implica para una pareja convertirse en padres primerizos? La naternidad es una experiencia maravilosa, pero el nuevo miembro de la familia obliga a modificar intereses y aspectos esenciales de la personalidad de uno mismo y de la pareja

Por hola.com

Fue el pasado mes de enero cuando Manuel Carrasco anunciaba a través de su perfil de Instagram que el bebé que esperaba junto a Almudena Navalón sería una niña. Hoy, el cantante y la periodista pueden poner fin a la espera y estrechar a su primera hija entre sus brazos. Según ha podido saber Hola.com, la hija de Manuel Carrasco y de Almudena Navalón ha nacido en el Hospital Universitario Quirónsalud de Pozuelo de Alarcón, en Madrid.

Este nacimiento supone el inicio de una nueva etapa para la pareja en la que, en algunas ocasiones, la ilusión quedará eclipsada por momentos de desconcierto y estrés. Y es que, la experiencia de convertirse en padres primerizos es un acontecimiento maravilloso, pero las demandas del nuevo miembro de la familia obligan a modificar intereses y aspectos esenciales de la personalidad de uno mismo y de la pareja. Es una enorme responsabilidad que lleva implícitas grandes dosis de sacrificio y un cambio a nivel emocional que a veces cuesta gestionar.

“A pesar de tratarse de un acontecimiento de enorme felicidad, la maternidad provoca en la mujer una serie de alteraciones psicológicas. La principal es el cambio en el estado de ánimo, pero también puede aparecer nerviosismo excesivo, preocupaciones, miedo intenso o incluso ataques de pánico en ambos padres”, comenta Paz de Roda, Directora del Servicio Psicológico online Therapychat.

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Cambios psicológicos en la mujer durante el embarazo

La psicóloga Paz de Roda incide en los cambios que sufre la mujer incluso antes de dar a luz: “El primer trimestre del embarazo se caracteriza por continuas variaciones de humor, en ocasiones unidos a la aparición de estrés, ya sea por el temor a no ser capaz de asumir la nueva situación o por modificaciones corporales. Estos cambios psicológicos están potenciados en gran medida por variaciones hormonales y desaparecen en el segundo trimestre del embarazo, alcanzando la estabilidad emocional. En el periodo final del embarazo vuelve la ansiedad, en este caso con preocupaciones por si el bebé tiene algún problema o por miedo al parto”.

Una vez ha superado el parto, puede aparecer “melancolía postparto”. Esta patología se caracteriza por un periodo de tristeza, llanto fácil, irritabilidad e incluso insomnio, síntomas que tienden a remitir en cuestión de días o un par de semanas. “Si esas manifestaciones emocionales no se resuelven con el paso del tiempo podemos hablar de depresión postparto, añadiendo a los síntomas mencionados anteriormente la pereza, la fatiga o sentimientos de culpa entre otros”, apunta la psicóloga. En estos casos, la ayuda de un psicólogo es fundamental para recuperar la estabilidad emocional y un nivel de energía adecuado.

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Los principales miedos de los padres primerizos: ¿Seré un buen padre?

Uno de los sentimientos innatos de todo ser humano es el miedo a lo desconocido; y para las madres y padres primerizos no hay nada más desconocido que la llegada de un bebé a la familia. ¿Cómo saber si está enfermo o si el llanto es normal? ¿Cómo estar seguro de que ha dormido o comido lo suficiente? ¿Cómo sé si llora porque tiene hambre o porque tiene sueño? Los niños no vienen con un manual de instrucciones ni los padres nacen sabiendo, por lo que se siente atemorizados y dubitativos. Y, por muchos consejos que hayan aceptado, les costará ponerlos en práctica y tardarán en descubrir cuáles son productivos en su caso concreto.

Según la psicóloga, “el principal miedo de los padres primerizos es que le pase algo a su bebé, por lo que suelen comprobar continuamente si respira o si está todo en orden. Una vez que se supera ese miedo inicial, suele aparecer la preocupación sobre si sabrá ser un buen padre. Esta duda incluye desde lo más básico como el no saber qué necesita el bebé, hasta preguntarse si van a ser capaces de educarle bien. En la mayoría de los casos también aparece una preocupación económica por ser capaces de afrontar los nuevos gastos que supone para el hogar la llegada del bebé. Es posible además, que a alguno de los padres le preocupe no poder estar mucho tiempo con el bebé por causas laborales”.

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¿Cómo superar los momentos de estrés o desacuerdo con la pareja?

“El proceso de convertirse en padres por primera vez acarreará consecuencias a nivel de pareja ya que el estrés, el cansancio y la inseguridad se pueden convertir en motivo de discusión, desacuerdo o distanciamiento. Ser padres primerizos será mucho más llevadero si existe buena comunicación entre los dos miembros de la pareja; hablar con calma de las emociones y necesidades y hacer gala de la comprensión hará que la relación se fortalezca y que sus miembros se conviertan mutuamente en el apoyo necesario en momentos de duda y tensión ante su nueva situación”, señala la psicóloga de la plataforma de psicología online Therapychat.com.

Por otro lado, los padres han de ser conscientes de que comienzan un proceso de redefinición de roles. Se convierten en padres y educadores. “Incorporar este rol al resto de roles que han adquirido durante toda su vida exige tiempo y paciencia”, reconoce Paz de Roda. Un aspecto clave es admitir que, como padres y sobre todo como padres primerizos, hay un margen de error que tienen que asumir y aceptar como algo normal y que ya corregirán a través de la formación y la experiencia.

Cinco consejos para los padres primerizos

  1. Paciencia. Los problemas y las preocupaciones van a aparecer de golpe, pero si utilizamos estrategias adecuadas también desaparecerán sin generar mayor conflicto.
  2. Nadar en la misma dirección que nuestra pareja. Los dos miembros de la pareja deben ir en la misma dirección y utilizar un mismo estilo educativo. Es fundamental que al niño no le lleguen mensajes contradictorios.
  3. Ser un buen ejemplo. Los niños aprenden gran parte de sus conductas por imitación, por tanto, lo que observen en casa es decisivo para su desarrollo.
  4. Educar las emociones. Para alcanzar un desarrollo pleno tan importante es la parte cognitiva como la emocional. Los niños con mejores habilidades emocionales son capaces de enfrentarse de manera más eficaz a los retos que se le planteen.
  5. Establecer límites. Es una de las cuestiones más importantes y a la vez complicadas en la paternidad. Los límites dan seguridad a los niños y les marcan el camino a seguir.
  6. Acudir a un especialista cuando la situación se haya descontrolado y nos veamos incapaces de tomar las riendas. Un profesional sabrá guiar y dar las pautas que sean más útiles en cada momento.