El verano toca a su fin y el regreso al cole y a la rutina está a la vuelta de la esquina. En las familias reales ocurre lo mismo y Estelle de Suecia se dispone a retomar sus obligaciones y actividades. Una agenda en la que la que la pequeña Princesa opina cada día más, no en vano el próximo mes de febrero cumplirá los cinco años, y ya ha decidido hacía donde encaminará sus pasos… ¡hacia el ballet!
Si bien es cierto que al ser la tercera a la línea de sucesión al trono sueco, la hija de Victoria de Suecia tiene parte de su futuro escrito, eso no quita para que pueda convertirse en una gran bailarina. Con este fin, y según ha revelado Expressen, la nieta mayor de los Reyes de Suecia acude desde hace tiempo y una vez por semana a una prestigiosa escuela de danza, Base 23, fundada por Anneli Alhanko, una de las bailarinas de Suecia más importante e internacional de Suecia.
Estelle de Suecia, una 'copia' de mamá
La princesa Estelle cumple cuatro años y su mejor regalo está a punto de llegar
Según el citado medio sueco, Estelle probó el año pasado diferentes tipos de baile pero ha sido el ballet el que ha captado su interés y será la disciplina en la que se vuelque durante este curso. Su padre, el príncipe Daniel, durante un acto reciente en Almedalen, contó que a ella le gustaba mucho bailar, sin embargo, hasta ahora no se sabía que lo hacía con regularidad y formándose para ello.
Tirando de hemeroteca, se podría decir que Estelle de Suecia ya ha demostrado en algún acto oficial tener el ritmo metido en el cuerpo desde pequeña. No en vano cuando su abuelo celebró los 40 años en el trono en el año 2013, su nieta, que acaba de empezar a caminar, ya demostró sus dotes para el baile encima de una mesa animada por su tía Magdalena de Suecia. En julio del año pasado tampoco dejó que la lluvia le parara e hizo alguna pirueta cuando le cantaban a su madre el cumpleaños feliz.
Las cámaras también la "cazaron" el pasado abril en el cumpleaños de su abuelo, al que acudieron los reyes don Juan Carlos y doña Sofía, y Estelle ofreció un espectáculo de danza en el momento menos esperado, a juzgar por la cara de sus tíos, cuando el Rey pasaba revista a la Guardia Real que venía seguida por el cuerpo de músicos de las Fuerzas Armadas. Si hay música, ¿por qué no bailar?
