Una de sus pasiones es el diseño de joyas y ayer presentó su nueva colección, en la que una vez más ha puesto todas sus ganas y su ilusión. Genoveva Casanova brilló al igual que las piezas de Ceiba, un árbol sagrado de la cultura maya que muestra cuál es el camino a seguir en la vida y que da nombre de esta colección, que supone su segunda colaboración con la firma de joyas Chocrón. Se trata de joyas realizadas en ámbar, en el estado mexicano de Chiapas, y con ellas quiere hacer llegar a España la cultura azteca.
Genoveva ha estado muy comprometida con su proyecto desde el primer momento y ella misma se fue en marzo al estado mexicano de Chiapas para buscar las piedras de ámbar, que junto con el oro rosa y el cuero son los componentes de las cuatro piezas con las que se ha dado vida a Ceiba: un colgante, una pulsera, un anillo y unos pendientes que ayer lució orgullosa en la presentación en Madrid. “En este caso me inspiré en México, en mi país, en la cultura indígena de un estado muy bonito que se llama Chiapas y la verdad es que ha sido una suerte porque hemos contado con el apoyo del Gobierno de mi país. Hemos podido conocer cosas maravillosas buscando las piedras e inspirándonos”, contaba.
El Gobierno mexicano le ha prestado su apoyo para sacar adelante esta colección y ella asegura que esta es una gran ocasión para difundir la cultura de su país: “Creo que es muy importante promover que se conozca en México a los españoles y que se nos conozca a los mexicanos en España y que tengamos esta relación tan cercana, como puede ser a través de la difusión de la cultura”.
Además de en este proyecto de diseñadora de joyas, Genoveva Casanova está muy ilusionada con su papel como directora de Proyectos y Relaciones Internacionales de la Fundación Casa de Alba y con sus trabajos humanitarios, pero sobre todo con su papel de madre. Hace unos días contaba en las páginas de la revista ¡HOLA!, cómo se siente al ver que sus hijos ya están tan mayores: “Ver a mis hijos tan grandes me da mucho miedo, pero, al mismo tiempo, es una sensación muy bonita porque te empiezas a desprendes del papel de mamá y te das cuenta de que vives con dos amigos”.
Genoveva también está muy contenta porque su madre se encuentra ahora a su lado en España, donde se recupera del derrame cerebral que padeció. “Mi madre está muy contenta de esta aquí, feliz e ilusionada”, decía. La excelente relación que lleva con su exmarido y padre de sus hijos, Cayetano Martínez de Irujo, también es uno de los motivos que hacen que la guapa mexicana luzca una gran sonrisa: “Siempre nos hemos llevado muy bien y siempre vamos a tener una relación bonita”. Respecto a una posible reconciliación, ella tiene claro, que en el caso de que ocurriese, la palabra reconciliación no sería la correcta: “No hay reconciliación porque nunca me he peleado. Nuestro objetivo es mantener a la familia unida por encima de todo”. También ha hablado de la duquesa de Alba, quien siempre la seguirá considerando su nuera: “Yo también siempre hablo de la duquesa de Alba como mi suegra”.
