Tu piel es la parte que más sufre los efectos del verano. Sequedad, irritaciones, quemaduras... Temporada tras temporada, intentamos transmitirte una serie de recomendaciones prácticas para conseguir que tu cutis no sufra las consecuencias negativas de la exposición solar y de las altas temperaturas. Y lo hacemos con la ayuda de una de las grandes expertas en cuidado de la piel de nuestro país, Maribel Yébenes, quien nos da una serie de consejos para que el verano no deje en nuestra piel ¡nada más que buenos recuerdos!
Piel limpia... ¡piel sana!
No nos cansamos de repetírtelo... aun a riesgo de ser pesados por la insistencia. La piel del rostro debe limpiarse mañana y noche con leche limpiadora seguida de tónico.
Un truco: Puedes guardar tus productos en la nevera para favorecer un efecto tonificante y refrescante. De este modo, la limpieza y tonificación se convertirán en un verdadero momento de placer vivificante. Mientras, la del cuerpo debe limpiarse con mayor suavidad, ya que el sol, la sal y el cloro son grandes agresores de su equilibrio hídrico y la pueden debilitar. Recurrir a geles limpiadores sin jabón es la opción más adecuada.
Agua, agua ¡y más agua!
En verano, tu cuerpo te pide más hidratación y más nutrición. Ya nos lo comentaba Paula Echevarría hace unos días cuando hablábamos de sus trucos de belleza, "en invierno no necesito un extra de hidratación nunca, pero en verano sí", nos explicaba.
Tus aliados: Sérums y cremas con gran carga de antioxidantes, como la vitamina C y el té verde, humectantes como el ácido hialurónico, la glicerina y la urea, y agentes reparadores como el colágeno, la elastina y los aceites botánicos naturales serán nuestros grandes aliados, tanto en el rostro como en el cuerpo.
Frente al sol, ¡protección!
Estamos en los meses en los que más nos exponemos al sol de forma directa. Y es que ¿quién no disfruta luciendo el añorado tono bronceado en su piel? Por eso, es imprescindible protegerse del astro rey a diario utilizando un filtro UV de calidad adecuado a las necesidades particulares de nuestra piel tras la rutina de limpieza e hidratación. Y si de tomar el sol se trata, repetir la aplicación del producto cada dos horas como mínimo, hayamos estado en el agua o no, y nunca excedernos en el tiempo de exposición. No debemos querer conseguir un tono excesivo para nuestro fototipo, no resulta atractivo y puede generarnos futuros problemas de salud y favorecer la aparición de arrugas, manchas, etc.
Un extra: sombreros y gafas de sol se convierten en un must de tu 'equipaje' veraniego. La gafas, además de proteger tus ojos, evitarán que te salgan las temidas arrugas gestuales, producidas por los guiños ante la luz. Y los sombreros también te echan una mano, dándote ese extra de sombra tan necesaria cuando el sol aprieta.
Toca reparar
A pesar de todas las precauciones que tomemos en los meses de verano, lo cierto es que nuestra piel puede sufrir pequeños daños colaterales. Por eso, es imprescindible aportarle a nuestra piel principios activos antioxidantes y reparadores que nos ayuden a contrarrestar las agresiones del sol, el mar, el cloro, el viento, etcétera.
Mejor por la noche: Los sérums y cremas ricas en ácido hialurónico, colágeno, elastina, soja, vitaminas y aceites nutritivos deben aplicarse cada noche. Mientras que las mascarillas hidratantes podrán ser aplicadas a diario.
Y no sólo a nivel externo
Tienes ya claro que las cremas hidratantes y los protectores solares se convierten en tus mejores compañeros de viaje en verano. Pero no sólo de cremas vive tu piel. También puedes ayudarla desde dentro: bebiendo agua en abundancia, y comiendo frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras de alta calidad y evitar todo tipo de comidas procesadas, bebidas azucaradas y carbonatadas, harinas y bollería en la medida de lo posible,
¿El objetivo? Nos ayudará a mantener un equilibrio interno óptimo y nos asegurará un aporte de antioxidantes, proteínas, carbohidratos, vitaminas y grasas adecuado que repercutirá en la belleza y fortaleza de nuestra piel.
Tus aliados: Espuma en crema limpiadora B+, limpieza para pieles sensibles. My Perfect Skin Serum de Ami Iyök, un sérum para pieles mixtas o grasas que unifica el tono y matifica gracias a la poderosa acción de los activos de origen orgánico. Aquaquench Total Moisturizer, de Suiskin, crema hidratante enriquecida con agua de mar abisal de Corea. Spray protector Ecran Lemonoil, SPF 30, cómodo formato para mantener tu piel protegida del sol. Tan Enhancing Polish, exfoliante de St. Tropez retira las céulas muertas sin dañar la piel.
